Junto a la higiene dental diaria, las visitas regulares al dentista son parte importante para mantener la salud oral. Visitar al dentista regularmente puede ayudar a prevenir enfermedades de la cavidad oral. Es importante no ignorar los síntomas de enfermedades en la cavidad oral, para poder hacer un diagnóstico precoz.
Tanto adultos como niños deberían hacerse revisiones rutinarias dos veces al año. Comprobar la ausencia de caries es sólo una parte de la visita al dentista. Un dentista también tiene que comprobar el estado de los tejidos que rodean al diente, ya que es el encargado de revisar los tejidos blandos de la boca, tanto encías como lengua, labios, mucosa de la mejilla, paladar, etc.
Rara vez la caries da síntomas al inicio de su formación, empezando a molestar con el frío cuando ya se ha formado una cavidad. Según avanza la destrucción del diente por caries, empezará a molestar con el calor y al morder, siendo el tratamiento restaurador cada vez más complejo.
El sangrado de las encías es un signo claro de gingivitis. La gingivitis está provocada por la placa bacteriana que rodea al diente, que no ha sido eliminada correctamente mediante la higiene dental. La gingivitis y periodontitis afecta al tejido que rodea al diente, llegando a provocar destrucción de hueso y recesión de la encía. El tratamiento de una periodontitis avanzada puede incluir cirugías para eliminar correctamente la placa bacteriana. Visitar regularmente al dentista puede evitar tratamientos más invasivos gracias al diagnóstico precoz.
El dentista también es el encargado de la salud de los tejidos blandos de la boca y alrededores, usando la inspección clínica o radiológica para evaluar la correcta salud oral del paciente. Es él la persona encargada de detectar enfermedades en los tejidos blandos, siendo el primero en revisar infecciones, bultos, anormalidades, decoloraciones, etc. El dentista es parte importante en el diagnóstico del cáncer oral, siendo el encargado de identificarlo de manera precoz, mejorando el pronóstico de el tratamiento necesario en cada caso.
Los problemas de la articulación temporomandibular, que une la mandíbula con el cráneo, también son inspeccionados durante una visita rutinaria al dentista. Éstos problemas son ocasionados en muchas ocasiones por problemas dentales, y es durante la revisión que se hace una evaluación correcta de las posibles patologías y sus causas.
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