Los primeros dientes suelen aparecer, normalmente, entre el sexto y el octavo mes de vida del bebé.
A menudo el proceso eruptivo de la dentición temporal resulta molesto e incluso doloroso; un proceso durante el cual puede aparecer irritabilidad, aumento de la salivación, disminución del apetito y, a veces, ligera febrícula.
Recomendaciones:
- Dar un masaje con el dedo en las encías del bebé.
- Durante este periodo es recomendable que el niño esté bien hidratado, para lo cual debe aumentarse la ingesta de agua.
- Disminuir la temperatura de los alimentos y enfriar papillas y biberones.
- El uso de productos de aplicación tópica con efectos sedantes en las encías no son recomendables, porque pueden interferir en el proceso de erupción.
- Existen en el mercado mordedores de goma que son muy útiles para calmar el dolor de la erupción. Su compra debe hacerse en farmacias para que estén debidamente homologados.
- Los antitérmicos y analgésicos tipo paracetamol, a dosis adecuadas, siempre bajo la supervisión del pediatra, son la medida ideal.